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No se puede ir por tierra y agua a Brasil; en avión, con test negativo

Porto de Galinhas. Foto: Canva.com PauloVilela
Porto de Galinhas. Foto: Canva.com PauloVilela

La medida se exigirá a partir del 30 de diciembre, para todos los que quieran ingresar por aire. Prorrogaron por tres meses el cierre de las fronteras terrestres o fluviales. 

Parecen medidas contradictorias con el discruso del presidente Jair Bolsonaro y el ministro de Turismo Gilson Machado Neto. Mientras hablan de menores restricciones y desmienten una "segunda ola" de contagios de coronavirus, imponen medidas para los que ingresen a Brasil a partir del 30 de diciembre, incluso si son brasileños que vuelven a su país.

Esta semana, se decretó la obligación de ingresar con un test PCR negativo realizado hasta tres días antes de la fecha de arribo al aeropuerto.

"El viajero de procedencia internacional, brasileño o extranjero, tendrá que presentar a la aerolínea responsable por su vuelo, antes del embarque, un documento comprobando la realización de examen de laboratorio RT-PCR, para rastreo de la infección SARS-CoV-2, con resultado negativo/no reactivo, realizado como máximo 72 horas antes del embarque", dice la normativa publicada en el boletín oficial.

Según el portal especializado Hosteltur, la restricción "había sido recomendada hace varios meses por la Agencia Nacional de Vigilancia Sanitaria (Anvisa), pero el gobierno se había negado a imponerla". Quien no cumpla, puede ser deportado o repatriado, e incluso ser demandado.

En el mismo decreto se realizó la prórroga de tres meses para el ingreso de extranjeros por las fronteras terrestres o fluviales. Quienes deseen ingresar por vía aérea, deberán firmar una Declaración de Salud del Viajero, un compromiso de cumplimiento de las medidas sanitarias.