La Paz, Bolivia: los imprescindibles para comer, disfrutar y sanar con amuletos milenarios

20 de agosto de 2023,

Rodeada por las altas montañas del altiplano y custodiada por el hermoso e impactante Illimani, La Paz es una ciudad vibrante que lleva su propio ritmo y modo de hacer las cosas.

La Paz está ubicada a 3.600 metros de altura, sus edificaciones se esparcen entre los cerros formando un particular paisaje de ladrillos.

Sumergirse en su cultura y caminar por sus calles se convierte en una experiencia única donde no pueden faltar ciertos lugares en su recorrido.

Te contamos algunos imperdibles si visitás este destino.

Plaza Mayor de San Francisco

Ubicada en pleno centro, data de la época de la fundación y frente a ella la Basílica de San Francisco, hermosa construcción barroca del siglo 18. Esta plaza es uno de los puntos de encuentro más intensos que ofrece espectáculos artísticos, venta ambulante y comercios de todo tipo.

Mercado de las Brujas

Enigmática y encantadora, en esta zona se pueden conseguir artesanías y todo tipo de amuletos, pócimas y ofrendas para la Pachamama o para atraer la fortuna, el amor o el trabajo. En este Mercado también encontramos los Yatiri, que son los curanderos y sabios de la cultura aymara.

Plaza Murillo

Llamada antiguamente Plaza de Armas, este lugar fue centro de importantes sucesos históricos. En sus alrededores se encuentran verdaderas joyas arquitectónicas del período colonial paceño.

Miradores

El mirador Killi Killi es un lugar para tocar el cielo con las manos y apreciar toda la ciudad, ya que ofrece unas vistas privilegiadas de 360 grados con el fondo nevado del hermoso Monte Illimani.

Otro imperdible es su maravilloso teleférico, considerado el más largo, moderno y a mayor altura del mundo. A través de cinco líneas se puede sobrevolar la ciudad y lograr una maravillosa perspectiva por un precio muy accesible.

Entre sus muchos encantos, sus miradores con vistas de 360º de la ciudad destacan y enamoran. (Gentileza: Pixabay)

Empanadas salteñas pero de Bolivia

Una experiencia que hay que vivir en La Paz es saborear una “salteña” autóctona. Son empanadas muy jugosas, en general rellenas de ternera o pollo y papas con masa crujiente. El desafío es comerlas sin mancharse.