Calingasta, la razón para volver a San Juan

La inmensidad de las montañas es imponente, y más si son de nuestra cordillera. Entre sus picos altos y rojizos se abren valles que ofrecen paisajes espectaculares y caminos para disfrutar lejos del ritmo de la ciudad. Uno de ellos es el Valle de Calingasta, ubicado al sudoeste de la provincia de San Juan, a 150 kilómetros de su capital. Acá, las paradas obligadas para recorrerlo:

• San Juan esconde un oasis, y se llama Arroyo Turquesa

1. Ir de trekking

Una de las postas imperdibles para conocer la región es el cerro Mercedario, un monte que se alza hasta los 6.720 metros y se cuenta entre los más alto de América. Era un sitio sagrado para los incas, que en su cumbre nevada se comunicaban con el dios Sol. Para conocerlo hay varias opciones de trekking, y llegar hasta su base ya es un paseo imperdible.

2. Internarse en la naturaleza

El Parque Nacional El Leoncito es una reserva de más de 89.000 hectáreas de monte serrano. Un imperdible que, además, es de acceso gratuito. Es recomendable en cualquier época del año, pero en primavera tiene el plus de llenarse de retamos en flor.

• Turismo remoto en los Parques Nacionales de Argentina

3. Tocar las estrellas

Dentro de este parque se ubica un complejo astronómico con el mismo nombre. Cuenta con un enorme telescopio de 40 toneladas para maravillarse con el cielo sanjuanino. El paseo se completa con la exposición de fotografías astronómicas y un recorrido por los alrededores, bajo la sombra de los álamos.

Tanto por sus cielos como por sus cumbres y por su fauna autóctona, este sitio tiene todo lo necesario para trazar una ruta que sumerja en la naturaleza. Para anotar y descubrir.